Mad men

Desde hace años escucho que Mad Men era una serie revelación, estupendísima de la muerte.

La primera vez que la vi no me debió gustar el logo (cosa que mantengo, la imagen promocional y la cabecera me parecen espantosas) así que no preocupé más.

Siguió pasando el tiempo y las críticas mejoraban aun partiendo de unas magníficas, aún así, a mí ya me costaba bastante mantener al día mis series habituales, ¡Cómo para añadir una más!, afortunadamente mi vida es mucho más sencilla desde que un amigo me presentó a espoiler.tv y su magnífica agenda, ¡Cómo quiero a esa web! (que no os asuste el nombre, es un gestor de series, nadie os va a espoilear nada, y para quién no sepa lo que es espoilear, consiste en chafar algo contándote lo que va a pasar).

En internet empezaba a ver qué desbancaba a series míticas de gran calidad, El ala oeste, The wire (serie que tampoco he visto y que me da una pereza horrenda pero que al parecer es lo más). Yo sabía que ya llevaban varias temporadas y seguía sin saber si quiera de qué iba, así que tampoco me preocupé.

Este año, mientras veía la gala de los Emmys y vomitaba entre traje y traje (no es que fueran todos horrorosos, es que había cogido una gastroenteritis y mientras reestudiaba IVA y veía la alfombra roja vomitaba…) vi a Saffron, ya sé, Christina Hendricks, estaba allí, y eso me llamó la atención porque no era consciente de que la pequeña Saffron fuera tan famosa (lo siento, siempre será Saffron para mí, es lo que tiene ser una Firefly adicta, y aunque tiene varios motes, todos relacionados con la ausencia de sujetador que suele lucir pese a su voluminoso pecho, mejor la sigo llamando Saffron). Por cierto, iba horrible, creo que hasta mencioné en algún post lo fea que iba, un momento que lo busco ÉSTE (jo, qué coherente que soy conmigo misma, acabo de leer lo que escribí y es prácticamente clónico a este párrafo y mira que lo escribí hace seis meses… por cierto, no es que me haya aprendido el nombre, es que lo he buscado en imdb, sigo tan inculta como entonces).

En la misma alfombra roja vi a Elisabeth Moss, a la que yo conocía por hacer de la hija del presidente Barlett en El ala oeste, la pequeña Zoey, y también me llamó la atención por la misma razón, en mi mente esta chiquilla, al igual que Saffron era una secundaria de pacotilla y  sin embargo los periodistas se estaban matando por entrevistarlas.

Como soy una chica de recursos acudí a la Biblia de los que seguimos series y pelis, imdb y descubrí que ambas formaban parte del elenco principal de Mad Men, y ya ahí me picó muchísimo el gusanillo. (Creo que es el efecto Firefly imán, que hasta High School Musical he visto y mi única excusa es que Zac Effron sale en Firefly también… )

Al cabo de unos meses volví a leer algo sobre Mad Men, creo que sacaron una promo o algo así y quién fuera aprovechó para hablar de la genialidad de la serie, y entonces me enteré de que iba de un publicista en los años sesenta. No sé por qué pero justo entonces decidí que debería verla. La apunté en mi lista de cosas que ver cuando disponga de tiempo y me olvidé de ella.

Esta semana pasada me fui a Zaragoza y allí no tengo internet, todos los posts que se publicaron fueron programados, así que como sabía que iba a tener mucho tiempo sin internet me decanté por bajar Mad Men completa y llevármela conmigo.

Antes de irme le comenté a Anisdelmono  cuáles eran mis planes y él me dijo, bah, yo me bajé el primer capítulo, y me aburrí como una ostra, así que no seguí bajándolos. Ahí me entró el canguele… porque aunque no en todo, Anisdelmono y yo solemos coincidir bastante en cuanto a gusto por las series, a él le van más que a mí las policiales pero poco más…

Instalada en Zaragoza metí el dvd en el reproductor y le di a play. A los cuatro días había terminado con todos los episodios que me había llevado, literalmente los devoré y disfruté como una enana de cada uno de ellos.

No sé muy bien como plasmar la serie, no era en absoluto lo que esperaba, el hecho de que se desarrolle en una agencia de publicidad no importa lo más mínimo, lo realmente interesante es el retrato de la sociedad americana de los sesenta, la moda, las costumbres, los matrimonios “perfectos”, las amantes, el tabaco, los old fashion (nota mental: escribir un post sobre los old fashion), Marilyn, los Kennedy, el racismo, la homofobia, el sexismo… Todo se aborda y lo mejor es que no se juzga, no pretenden hacer quedar bien al protagonista, ni si quiera hacerlo quedar mal, vives con ellos, y no juzgas, solo te arrastras con ellos, no hay buenos, no hay malos, hay gente que hace cosas buenas y cosas malas.

Ha llegado un punto en que no sabía vivir sin Saffron, ahora Joanne, aunque reconozco que el momento cúspide ha sido una conversación entre ella y su exjefe (la reproduzco tal y como la recuerdo así que puede que alguna palabra no sea literal, pero sin duda ésta es la esencia):

E-J: Pelirroja, te echamos de menos

J: Qué detalle, ¿Alguna novedad por ahí?

E-J: Pryce ha decidido reordenar a las secretarias por orden alfabético.

J: ¿De copa de sujetador?

E-J: (risa pervertida) Sé en qué lugar te dejaría eso…

A simple vista, no es para tanto, pero es algo así como una prívate joke, ya he comentado la obsesión que tenemos todos los de mi círculo con los sujetadores de esta tipa, y el guiño ha sido sublime…

En fin, que recomiendo muy muchísimo la serie a todo el mundo.

Evil twins IV

Y una más de gemelos del demonio, en realidad esta relación la cree el año pasado, para verano cuando mi aburrimiento era tal que empecé a ver desde el principio la serie Arriba y Abajo (Upstairs, Downstairs). Cuando terminé de ver la primera temporada o algo así puse a bajar la segunda y mientras empecé a ver Big Love, cuya primera temporada también había descargado, incluso critiqué ambas series por algún post si mal no recuerdo. El caso es que en seguida me di cuenta de lo mucho que se parecían físicamente la jovencísima Margene a la listilla de Sarah, por la que no sé si siento pena o admiración.

A ver, obviamente son de otras épocas, que Pauline Collins tiene 60 años y Ginnifer Goodwin tiene 32, y los atrezos son completamente distintos en ambas series, pero aun así, esos mofletes, esa mirada bonachona, y sobretodo esa sonrisa que es de esas que te hacen sonreír también a ti en cuanto las ves hace que relacione a ambas mujeres en cuestión de segundos.

Os dejo con el espectáculo de variedades de Sarah en arriba y abajo que no tiene precio, encontrar videos y fotos de Ginnifer es facilísimo, así que googlear si quereis verla mejor, porque la verdad es que encontrar una foto de pauline de la época es complicado.

El abanico

El año pasado un día acompañé a mi padre a una tienda de estas que los finolis llaman “tienda multiprecio”, ergo, a las tiendas de los chinos, y como me asaba de calor le pedí a mi padre que me comprara un abanico, además vi uno que era monísimo y padre, que mola mil me lo compró.

Jamás he bendecido tanto el tener algo en el bolso como en Venecia mi abanico, dependí de él durante todos los días, hasta me salieron ampollas en la mano y en los dedos de tanto abanicarme, sí, sé que es triste, pero juro que es verdad. Yo salía del hotel y sacaba el abanico, era automático. La tipa del Museo del Cristal, en Murano, se enamoró de él…

Cuando volví a España lo usaba con orgullo y todo, porque antes casi no me atrevía a usarlo porque al menos por donde yo vivo nadie usa abanicos y menos la gente de mi edad, pero después de Venecia el abanico se merecía todo mi respeto.

Durante las vacaciones en la playa con mi familia el abanico se me cayó y se rompió. No monté drama ni nada, no fue como mi paraguas ni nada por el estilo, pero oye me supo mal, no obstante me olvidé de los abanicos hasta este año.

Hoy hacía un calor extremo y hemos ido a la misma tienda de chinos y de repente he pensado, ehhh, me puedo comprar un segundo abanico.

He mirado, había unos cuantos maravillosos que ponían ESPAÑA y tenían un torero con su capote y el toro contra él y la bandera española como fondo… Aunque me encanta hablar inglés y me encanta Inglaterra, no pienso comprar esas cosas tan de guiris, la única alternativa era un abanico liso y laso. Había varios colores pero todos eran muy sosos.

Entonces se me ha ocurrido, ¿y si me lo pinto yo?, así que lo he comprado decidida a pintármelo a mi gusto. Mi madre que es tan maja me ha dicho, pues como te quede bien, ya me estás pintando otro a mí.

Mientras terminaba de ver Warehouse 13 (o almacén 13 en español) me he dedicado a pintar mi abanico y la verdad es que no es una obra de arte y contando que es mi primer intento me ha salido bastante mono.

Seguro que Chico lo pone verde, pero como estará en Berlín esta semana no leerá mi blog y así me ahorro los ¿por qué has hecho esa atrocidad?

En fin, he sacado mi inspiración de google, obviamente, no es exactamente igual pero sí está inspirado en la obra de alguien.

Bueno, ¿qué os parece?

Top ten: SuperTiernos.

10. Chi

Es un manga (cómic japonés) de esos que se leen de atrás hacia adelante y con un orden de los bocadillos esotérico que siempre consiguen que me lie, pero en este caso hay poco guión y todo es muy visual. Se trata de la vida de Chi una gatita, contada obviamente desde el punto de vista de Chi. Chi es supertierna, es capaz de pensar un montón y perder toooodo lo que se le había ocurrido porque alguien le lanza un ovillito de lana. Tiene que enfrentarse al gigantesco gato negro (que en realidad tiene pinta de buena persona) y a su nueva familia adoptiva, un matrimonio con un niño pequeño, todos adoran a Chiii, es imposible no adorar a Chi.

9.  Insectosaurio

Pertenece a la película de Monstruos vs. Alienígenas, la peli era un rollo repollo y lo único bueno que tenía era insectosaurioooo, que es un bicho mudo, peludo y muuuuy grande. Tiene unos ojos gigantescos que miran (ejem, muy bien Taq, los ojos miran, a veces se nota un montón que tengo estudios).

No camina, se oscila, y tengo una seria debilidad por las cosas que oscilan, como los pingüinos, que también son super tiernitos. Este año en las ferias había peluches de Insectosaurio (y aunque es cierto que tendría que haberle dejado mi habitación al peluche y yo habría quedado desterrada de mi cuarto si hubiera pretendido meterlo dentro) me quedé con las ganas u.u

8. R2D2

Vaaaamosss, se comunica mediante pitiditos, es blanquito, es cíclope, como Lila pobrecillo, tiene decoración propia del cubismo, ¿cómo no vas a compadecerte de él? Siempre acompaña a C3P2 que es un muermo y encima es dorado, R2 es un rebelde, lo lleva en el aceite, el se arriesga con esas patitaaas…

Además, su nombre se le como ar tu di tu, reinterpretado por el público español como Arturito, ¿Cómo no enternecerse por un robot llamado Arturito?, es completamente imposible.

7. Miguelito

La inocencia de Miguelito hace que sea completamente imposible no derretirte con sus descabelladas ideas. Él quiere ser un niño, y le gusta ejercer como tal. Adoraba a su abuelito, que le metió en la cabeza que Mussolini era lo más y él lo repite cuál loro ante el asombro de sus amigos los rojarras.

Veeenga, que se indignó un montón el día que se enteró de que la profesora le preguntaba cosas que ella ya sabía… conoce sus propias limitaciones con las matemáticas y en el mundo prefiere sobrar de incógnito. Miguelito mola mil.

6. El gato con botas.

El gatito que pone ojitos brillantosos y con parkinson en Sherek. Cuando veo la primera sigo asombrándome de que no esté, es un personaje tan genial que se le echa muchísimo de menos. Ese deje andaluz le da un carácter apasionante, y vaaaamos, sienta precedente,¿ quién no ha amenazado a alguien cuándo quiere conseguir algo con ponerle ojillos de gato con botas? En la última entrega además se pone goooordo y es todavía más tiernito, sobre todo si se desliza por la cuerda raspándola.

5. Totoro

Si no habéis visto Mi vecino Totoro no tenéis derecho a la vida. No soy de las que defienden los animes, aunque suelen ser preciosos en cuanto a dibujo de fondos y colores las historias suelen aburrirme bastante, sin embargo Totoro, que es un precedente de insectosaurio en más mono es completamente adorable. Su primera escena, con la niña de las coletas dando saltitos hace que merezca la pena ver toda la película (por no hablar del gatobus, pero ese es otra historia… algún día conseguiré un peluche de gatobus). Son monísimos todos, los adoramos, pero a Totoro feliz de la vida porque puede dar saltitos con el paraguas y mojar cuando él quiere… no tiene precio. Too much tierno.

4. Las bolitas negras del viaje de Chihiro

En esta categoría también deberían entrar los bichitos blancos que menean la cabeza con un ruido enervante de l a princesa Mononoke, porque tienen la misma esencia, no tienen ninguna función en ninguna de las dos películas, ni los bichos negros ni los blancos, simplemente son monísimos. Y ojo, que su objetivo lo cumplen al 100%, son monérrimos a más no poder, si  me preguntas que de qué me acuerdo del viaje de Chiro digo que de un tren que se desliza por el agua, un espíritu con máscara algo inquietante, algo de unos cerdos y un dragón blanco y las bolitas negras monérrimas.

La verdad es que otra cosa no, pero los japoneses sí saben crear cosas tiernitas.

3. Meeko

Mi mapache preferido. El otro día veía Pocahontas junto a Facu y me pasé toooda la peli gritando ¡Qué majo es Meeko! (a mitad de peli ya había conseguido que Facu lo coreara conmigo).

Lleva al pobre colibrí por la calle de la amargura, siempre recuerdo cuando se tira por el precipicio e intenta montarlo para que lo alce volando (obviamente con poco éxito). Pero que conste que cuando más ternurita da es cuando se reconcilia con Percy , el perro mimado del gobernador, con el que tiene una batalla continua en toda la peli. ¿Acaso hay algo más tierno que ver a Meeko recoger las miguitas de las galletas que John Smith le ha dado con su dedito? (pues obviamente sí, sino estaría en primera posición).

2. Dobby

El elfo doméstico de Harry Potter. El pobre bicho es feo con ganas, en la peli es el evil twin de Putin, al parecer el tipo hasta se ofendió por ello, cosa que nunca entendí porque para mí parecerme a Dobby en realidad sería un honor. El caso es que el tipo es supermajodelavida, el se arriesga tropecientas mil veces para salvar, primero a un desconocido, y luego a un tipo que simplemente ha sido amable con él. Por su culpa lloré por primera vez leyendo un libro, aunque había devorado muchísimos libros tristes, nada me hizo llorar hasta Dobby. No se puede ser tan tiernito u.u. Además, le molan mil los calcetines estrafalarios… eso es un punto en su favor.

1. Marvin

Nuestro androide paranoide preferido. Marvin es lo más,  pertence a la saga de libros de la “Guía del autoestopista galáctico”, el primer volumen está adaptado al cine de una forma bastante fiel al libro, cosa que agradezco, y aunque marvin no se parece en nada al que yo imaginaba de los libros, sigue siendo cautivador, de hecho es más tierno todavía por ello.

La verdad es que yo soy mema, y primero me leí el restaurante del fin del mundo (que es el segundo volumen de la saga) porque yo no sabía que era una saga, pero mientras lo leía fui al cine y vi el tráiler de la Guía del autoestopista galáctico, y si ya de por sí es raro que los personajes de algo se llamen igual, el hecho de que uno ande por la vida en bata, el otro tenga dos cabezas y el otro tenga un androide paranoide, hace que te des cuenta de que se trata de la misma historia, que si las coincidencias existen, tantas seguro que no. Así que me leí el primero y aún me enamoré más de Marvin de lo que ya estaba… NO HAY PERSONAJE MÁS TIERNO QUE MARVIN. He dicho.

Bonus track: Superpig

Superpig es un personaje que yo cree de cría para un trabajo de inglés, era una superheroina con forma de cerda que nos iba a salvar a todos de los residuos nucleares. Tuvo tanto éxito que durante algún tiempo tuve que crear secuelas.

Luego con el tiempo se lo conté a mis amigas de la universidad, y con ellas revivimos a superpig, e hicimos una historieta de cómo nos salvarían de las aburridísimas clases de Procesal. Finalmente, para mi cumple me regalaron un peluche de superpig que habían manufacturado ellas, y que es precioso. I love superpig y es super tierna, tiene capita y todo.